Dídac Lee, fundador y CEO de Inspirit, cofundador de Galdana Ventures y vicepresidente de la Fundación FC Barcelona, ha explicado, en una nueva sesión de Matins ESADE patrocinada por EY (antes, Ernst & Young), con la colaboración de La Vanguardia, que “todos los emprendedores deben conocer muy bien cuáles son sus puntos fuertes y sus puntos débiles, así como ser humildes y realistas con sus propuestas”.

Dídac Lee, que cuenta más de veinte años de experiencia en la creación de start-ups y durante diecinueve años ha creado quince empresas, nueve de las cuales siguen funcionando, ha explicado que su trayectoria profesional empezó en el restaurante de sus padres, donde trabajaba como lavaplatos, ya que fue allí donde adquirió las aptitudes que todo emprendedor debe poseer: disciplina, constancia y perseverancia.

En la actualidad, desde Inspirit se dedica a ayudar a otros emprendedores a acelerar sus negocios a partir de la experiencia adquirida durante estos años. “Los mejores emprendedores que he conocido tienen una característica en común: son capaces de crear un equipo cohesionado y animarlo”, ha señalado Lee, y ha añadido: “La atracción que tenga un producto en el mercado también es una variable a tener en cuenta, pero el perfil del emprendedor es muy importante, ya que un buen producto siempre es consecuencia de un buen emprendedor.”

“El mercado no me entiende”

Dídac Lee ha sido reconocido como el Mejor Mentor de Start-ups Europeas por The Founder Institute y, según la revista Wired, es una de las cien personas más influyentes en ámbitos digitales de Europa. A lo largo de su carrera, el fundador y CEO de Inspirit ha fracasado en numerosas ocasiones y reconoce que, “cuanta más innovación hay en un proyecto, más elevada es la ratio de fracasos”. Según Dídac Lee, los errores más comunes que se cometen a la hora de emprender son, por un lado, no validar el mercado, factor que puede solucionarse con un simulador, y, tras lanzar un producto sin éxito, pensar que “el mercado no me entiende”, un aspecto muy relacionado con lo que Lee denomina el “ego creativo”, que se manifiesta en el emprendedor que ha creado algo.

El fundador y CEO de Inspirit considera necesario aprender de los errores porque “hay gente que fracasa y vuelve a fracasar porque no ha aprendido nada”. “Nada es para siempre: ni el éxito ni el fracaso”, ha defendido Lee, y ha concluido: “Si una cosa no sale bien, no pasa nada porque quizás otro día funcionará.” Además, “en una start-up, el tiempo es mucho más corto” que en cualquier otro tipo de empresa y “en un año puede pasar de todo”, ha añadido.