ESADE ha celebrado este viernes la graduación de cerca de 400 alumnos en el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona. Al acto han asistido, además de los graduados y profesores de los programas correspondientes, una gran afluencia de familiares y amigos. Los estudiantes han recogido sus diplomas, tras finalizar sus estudios en los diferentes grados universitarios impartidos en ESADE Business & Law School.

La presentadora del acto ha sido Diana Ferrer, profesora y directora del Máster en Asesoría y Gestión Tributaria part-time y del Máster Universitario en Abogacía de ESADE Law School. Los alumnos graduados pertenecen a la séptima promoción del Grado en Derecho (GED) y del Bachelor in Business Administration (BBA), y a la segunda promoción del Doble Grado en Dirección de Empresas y Derecho (DGBD).

Ha pronunciado el discurso de bienvenida Joaquín Uriach, presidente del Patronato de la Fundación ESADE. Durante el acto, también han intervenido Josep Franch, decano de ESADE Business School; Sergio Llebaría, vicedecano de ESADE Law School; Eugenia Bieto, directora general de ESADE, y Jordi Riera, vicerrector de Política Académica de la Universidad Ramon Llull y adjunto al rector.

Experiencia única de intercambio

Alberto Mateo Pino y Patricia Grau Serra, en representación de los alumnos del Grado en Dirección de Empresas han echado la mirada atrás, recordando el inicio del camino: “Así es como empezamos en ESADE, la universidad que hizo que algunos dejaran sus ciudades y vinieran a la maravillosa ciudad de Barcelona a estudiar administración de empresas. Una titulación que nos abriría muchas puertas pero que, al mismo tiempo, nos exigiría trabajar muy duro para conseguirlo.” Los delegados de los alumnos también han destacado “la experiencia única del intercambio”, una etapa que les ha permitido vivir en diferentes lugares del mundo.

Por su parte, los representantes del Grado en Derecho, Nuria Rodríguez Rosell y Carolina Dalmau Benavent, han manifestado la importancia del equipo y de estar unidos: “Poco nos imaginábamos que estos cuatros años se acabarían convirtiendo en una de las etapas más bonitas de nuestras vidas. Este tiempo ha sido suficiente para darnos cuenta de que contamos con una gran familia. Cada uno de nosotros ha adoptado un rol único, un papel muy importante sin el cual nada habría sido igual.”

“Para nosotros, el Doble Grado de ESADE es el respeto, la admiración y el agradecimiento a quienes nos han enseñado con mucha paciencia; es la entereza que hemos logrado demostrar ante una situación de estrés y un sacrificio hasta ahora desconocidos; es el rigor de la integridad profesional que nos han inculcado y que nos permite presumir de una sana ambición”, han expresado Diana Maria Nicorescu y Pablo de Rabasa Delgado, representantes de los alumnos del Doble Grado, describiendo lo que para ellos ha significado este tiempo.